Notas:
1. Charly: Término usado en Medio Oriente para englobar a trabajadores del servicio bien sean Árabes, Indios, Pakistaníes, Bangladeshí, Filipinos ó de Sri Lanka (Este término es en la mayoría de las veces despectivo).
2. \\O.o// = Gráfico ideado por mi amigo RMM, para denotar en lenguaje escrito el clásico gesto de los Charlies.
3. Sociedad Secreta: Agremiación de Charlies unidos.
Hola a todos. Como algunos de ustedes ya sabrán, estoy cruzando ahora la etapa final del ciclo Medio Oriente, y no quisiera irme de estas amarillentas tierras sin antes dejar algunas anotaciones que bien podrían servir a quienes estén apenas comenzando a vivir en este edificado desierto, o bien, a quienes en un futuro se aventuren a venir a vivir experiencias de este lado del globo.
Con el transcurrir del tiempo, he ido comprendiendo que no hay nada misterioso en vivir en alguno de los países árabes, y que la buena o mala adaptación solo depende de la capacidad individual para entender que el quid del asunto está en lo que yo llamo "La Filosofía Charly", que no es otra cosa que la gran plataforma en la que están sostenidas la mayoría de las cosas de este andamiaje.
Se que todo esto suena un poco extraño, pero si entramos a buscar argumentos por los vericuetos de dicha corriente veremos como todo se va aclarando y no deja lugar a dudas que dicha filosofía es la madre de todo este establecimiento.
Lo primero será entonces definir los términos de ¿Quienes son?, ¿Dónde están?, Filosofía, Precauciones y Convivencia; y tendríamos así un manual básico (para Dummies) de supervivencia a los "Charlies".
Empecemos pues con las definiciones:
¿Quienes son?: Los Charlies son todos aquellos trabajadores de origen árabe, indio, pakistaní, bangladeshí, filipino o de Sri Lanka, dedicados a servicios generales y a la atención.
¿Dónde están?: Son omnipresentes. Están en todos los sitios a los que vayas: supermercados, restaurantes, oficinas, estaciones de gasolina, almacenes, fronteras, aeropuertos, compounds, etc.
Filosofía: Es una corriente de pensamiento hecha básicamente para el servicio, pero que por las condiciones de esclavitud y sumisión que por origen y funcionamiento se tienen sobre los pertenecientes a esta filosofía, no siempre se hace de buena gana. En otras palabras, la visión que se tiene en Medio Oriente de estos personajes como esclavos, les hace, muy entendiblemente, responder y actuar hacia sus servidos de una manera poco agradable.
Dentro de la escuela Charly hay un par de matices que ya otras veces he explicado, pero que bien merecen la pena ser recordados para su fácil reconocimiento: 1. Los gestos: siempre que se dirigen a ti emprenderán un movimiento de vaivén lateral de cabeza igual al de los perritos que hay en los taxis Colombianos pero a toda velocidad, y simultáneamente harán un giro de mano de 180 grados de abajo hacia arriba. Hasta los dedos tienen posición especial en ese giro, imaginen la pata del pollo en sopa de carretera, que siempre tiene unos dedos amenazadores hacia arriba, pues lo mismo (Para efectos de este texto usaré el ícono \\O.o// para representar los gestos que acabo de explicar). Y, 2. La escala Charly: tiene que ver con la jerarquía de clases que hay entre ellos, porque se marcan las diferencias hasta dejar claro que hay unos con mejor posición que otros. Que sirva de ejemplo esto que me ocurrió un día en la oficina: se estaba reordenando el espacio y movimos escritorios, archivadores, etc. Y cuando me estaba instalando en el mío, le dije al Charly de los tintos que me ayudase a limpiar y me dijo: "\\O.o// Claro, claro \\O.o//", pero no lo hizo él, sino que le dio un grito a otro Charly, el otro vino y evaluó la situación y llamó a un tercer Charly que era el más nuevo y fue él, el que acabó haciendo la limpieza, mientras los otros dos seguían leyendo el Corán en la cocineta.
Aclarado lo anterior, y sabiendo que cerca del 80% de las cosas que se hacen aquí, bien sean personales o de trabajo, siempre tendrán que ver con algún Charly, es mejor estar preparados para las innumerables "sorpresitas" que estos silenciosos personajes tengan reservadas para ti.
En síntesis "La filosofía Charly" = Yo te sirvo, tu pagas, pero espera a ver como te sorprendo mientras te sirvo \\O.o// je je je…! (Risa Charly maliciosa). Y así transcurre el día a día por estos países.
Precauciones: Como siempre hay un constante riesgo de recibir alguna "sorpresita" (que comúnmente llamamos ataques) por parte de la "Sociedad Secreta", mi recomendación es estar siempre preparados y alertas, aunque la gran mayoría de las veces no sirva de nada y siempre acabes cayendo en la trampa.
He aquí pues algunas sugerencias para situaciones comunes sustentadas con sucesos reales que aquí hemos tenido que padecer:
La hora del rezo: Es fundamental que nunca se olvide que estos países son fundamentalmente musulmanes y por ello mismo comprender que las cinco veces al día que sucede la hora del rezo son sagradas y en consecuencia toda actividad se detiene durante su transcurso y saber que los diez minutos previos a la oración la comunidad Charly empieza a entrar en una especie de trance de ansiedad o pasividad del cual solo tu serás la víctima. Ejemplo: El supermercado: hace poco que estaba haciendo mercado justo en la delgada línea de tiempo de que ya casi van a cerrar y el Charly en su tranquilidad me hizo un "súper combo" es decir, tres ataques en uno, lo primero fue que el Charly que me pesó las frutas puso mal la pegatina del código de barras y cuando las fui a pagar, el cajero cogió la bolsa rompiendo el código de barras y estuvo mas de tres minutos (que en ese momento son una eternidad) tratando de pegarlo para que el lector se lo leyera y al final lo consiguió sin inmutarse ni por el tiempo, ni por la fila de gente que lo mirábamos impávidos. Luego me dice: "\\O.o// señor, el código de este producto no lee, entonces no lo puede llevar \\O.o//", entonces le digo: "¿Cómo que no?, mande a alguien a que lo cambie como sucede en todos los supermercados del mundo", pues no, no lo hizo y se limitó a mover cabeza y manos \\O.o// y me ignoró. Luego acabó de registrar todo el mercado y le entregué la tarjeta débito, la pasó tres veces, y las tres veces le falló, entonces me dice caradura: "¡Ahhhh si!, \\O.o// lo que pasa es que desde hace mas de dos horas el sistema del supermercado está caído, vaya a un cajero y vuelve \\O.o//" sobra decir que los cajeros estaban llenísimos porque todo el mundo estaba en las mismas. Al poco rato, regreso echando humo por las orejas y con el efectivo en las manos y le digo: "Listo, tome el dinero que me voy con mi mercado" y me replica: "\\O.o// No, no, no señor, espere que tengo que volver a registrar todo otra vez \\O.o//, aunque no se si me de tiempo, ya vamos a cerrar, entonces mejor vuelva en media hora \\O.o//". Yo creo que el hombre hábilmente detectó que si no lo hacía ahí mismo, podría haber terminado picado en un shawarma esa misma noche, así que procedió, no sin antes repetir la misma maromita del código de barras roto en la bolsa de las frutas. ¡PLOP!.
Sugerencia: NUNCA vaya a mercar muy cerca de la hora del rezo y siempre disponga de efectivo, así no le da papaya al Charly.
Procure no infartarse o necesitar una ambulancia: Un año atrás, estábamos en el festival anual de la cultura árabe Janadriyah y cuando llegó la hora del rezo, las hordas de gente se tumbaron sobre las calles a hacer sus oraciones. Justo en ese momento venía una ambulancia pidiendo vía con una emergencia médica y necesitaba cruzar cuanto antes la calle para salir del recinto ferial, pero ¡oh sorpresa!, nadie se movió y la ambulancia tuvo que reversar para buscar caminos alternativos para salir, mientras toda la comunidad Charly permanecía orando como si nada hubiese pasado.
Procure no asistir a conferencias de proveedores fuera de horarios laborales: Hace pocos meses asistimos a un prestigioso hotel de la ciudad a atender una conferencia sobre pinturas para climas extremos, y en medio de la conferencia el Charly que la dirigía se detuvo y dijo: "\\O.o// Señores, vamos a hacer una pausa por el rezo, nos volvemos a ver en media hora \\O.o//", en ese momento ves como el 90% de sala se va a rezar mientras nosotros nos quedamos mirando para el techo, porque incluso no hay ni siquiera quien te ponga un tinto.
Procure aguantar sus ganas de hacer pipí: Esta siempre será la mejor opción si está en algún sitio público o en su oficina justo antes del rezo. Así se evitará ver a los Charlies haciendo la respectiva ablución previa a la oración de manera muy desagradable, es decir, gente sonándose los mocos durísimo y lavándose los pies todo junto en el lavamanos. También se evitará el tener que esquivar los charcos que dejan como consecuencia de lo anterior. Así que mi sugerencia es que vaya al baño por lo menos media hora antes del rezo o media hora después cuando ya hayan regresado y hayan puesto al Charly de menor rango a secar todo ese desastre. ¡A propósito!, siempre me he preguntado ¿Cómo es que en un país como este, donde el asunto del rezo es una cosa tan seria, como es que no hay un sitio especial para la ablución que esté adjunto a las salas de oración que están, estas si, obligatoriamente en todas partes?.
Tenga siempre un Ipod o un buen libro a la mano: Si estás solo y te sorprende la hora del rezo en alguna caja y no alcanzaste a pagar, lo mejor es tener con que distraerse y así evitarán que les pase lo que me sucedió hace un año, cuando esperaba en la caja de un Home Center y de repente entró un Mutawwa (Policía religiosa) a echarle cantaleta de manera bastante agresiva a todos los que estábamos allí por el hecho de no estar rezando, por infieles. Como no tenía distracción, me fue imposible dejar de prestarle atención a la sarta de regaños que vociferaba ese señor.
La atención: En Arabia los Charlies no tienen el don de la atención, siempre serán constantes las órdenes de pedido equivocadas y hay cierta tendencia a la comodidad. Así que si alguna vez se ven envueltos en alguna situación así, lo mejor es armarse de paciencia, seguir firmes en la decisión o simplemente hacer gala de la resignación y simplemente dejar así. Por ejemplo, el fin de semana pasado estábamos cenando en un restaurante y pedí un "X" plato, y al cabo de 40 minutos empezaron a llegar los platos de los demás, pero del mío ni sombra, así que el Charly me dice caradura: "\\O.o// Señor, no quiere mejor cambiar su plato por otro, porque es que el suyo está muy demorado de cocinar \\O.o//" ¡Re-PLOP!. Así que haciendo gala de el consejo de mantenerme firme le dije: "¡Pues NO!, quiero lo que le pedí en un principio", como era de esperarse me puso a esperar y me sirvió cuando ya todos habían acabado, pero me quedé con la satisfacción de no perder la pelea.
Otras veces, como les decía, es mejor dejar así, sino, la experiencia puede ser aun peor. Ejemplo: En otro restaurante que nos habían recomendado porque tenían muy buen pescado para compartir, le hemos dicho al mesero que nos explicara cual era la mejor opción y nos dijo que lo ideal era que pidiéramos un pescado de un kilo por cada tres personas y que era suficiente, así que como éramos seis, le hemos dicho que trajera dos pescados de un kilo cada uno, al cabo de media hora, sirvió un solo pescado en la mesa y por cortesía nadie empezó a comer esperando que el otro pescado llegase pronto. Pero luego de ver que no llegaba, llamamos al Charly y le preguntamos que porque no traía el otro pescado a lo que respondió: "\\O.o// ¿Cual otro pescado? \\O.o//" y le dijimos: "Pues hombre, el otro que te pedimos, eran dos pescados de un kilo cada uno" y replicó: "\\O.o// no, no, no, era un pescado de dos kilos y eso fue lo que les traje \\O.o//" ¡Requete-PLOP!, ante tamaño ataque decidimos dejar así y compartir lo que había en la mesa.
En el trabajo: Tenga siempre un plan de contingencia y nunca se confíe de las respuestas, incluso si ya has preguntado más de tres veces si todo quedó claro, porque siempre te pueden sorprender con situaciones como estas: 1. Una vez una de las personas que estaba a mi cargo llegó tardísimo a trabajar y se sentó de lo más fresco en el puesto sin dar explicaciones por su tardanza, así que me acerqué a preguntarle el motivo y me respondió: "\\O.o// ayer fueron los Premios Oscar \\O.o//" y le dije:"¿Y eso que tiene que ver?", me miró inquisidoramente y me respondió: "\\O.o// pues como que ¿qué tiene que ver? \\O.o//, que se acabaron como a las cuatro de la mañana y no iba a llegar a trabajar así de trasnochado \\O.o//" ¡PLOOOOOOOOOOOOOOOP!. 2. Lo que le pasó a mi amigo SMB en su oficina: le dijo al Charly: "Viejo, hay que entregar urgente tales y tales planos, ¿para cuando crees que los tienes?" Y el Charly muy efectivo le respondió: " \\O.o// today sir. \\O.o//" (léase "tudei" = hoy)", y mi amigo le preguntó: "¿Seguro?" y el Charly le aseguró que si, que efectivamente lo haría ese día. Al caer la tarde, en vista de que el Charly no entregaba nada, le han preguntado: "Viejo, ¿Qué hubo de los planos?" y el Charly respondió:" \\O.o// ¿Cuáles planos? \\O.o//" y mi amigo: "Pues los que me has dicho esta mañana que "tudei"" y el Charly: "\\O.o// ¡ooooh! I´m very sorry sir \\O.o// I didn´t say today, I said two days" ¡PLOOOOOOOOOOOOOOOP!, el Charly en su ingles le dijo "tu deis = dos dias" y no "tudai = hoy".
La verdad es que creo que podría quedarme aquí contando los cientos de historias que aun tenemos guardadas con estos personajes adoradores del Cricket, pero no quiero aburrirlos más con estos ladrillazos de textos y creo que la ilustración es más o menos suficiente para que se hagan una idea de lo que es convivir en medio de otras culturas, y casi prefiero que las demás historias las dejemos para unas buenas cervecitas tertuliadas a mi vuelta a casa. Si todo lo anterior no les molesta mucho, seguro que tendrán estadías apacibles y sin problemas, sino, prepárense para volver un poco más calvos y más canosos de lo que un día llegaron.
Hasta la próxima…!