3.25.2008

Comunicado # 1: Primeras Impresiones. Marzo de 2007


Aquí están pues las primeras impresiones recibidas del continente asiático durante el corto lapso en que he habitado en él. Lo primero será contarles que Dubai, así como los otros seis Emiratos, son como unas especies de fincas reunidas a modo de país, y tal cual, como finca que se respete tiene un señor mandamás, un patrón que es el que dice que se hace y como se hace, sin importar lo que cueste. Nuestro patrón, o sea el dueño del Emirato de Dubai es Sheikh Mohammed Bin Rashid Al Maktoum, y tiene particularidades bastante excéntricas que solo su buena mente lo podrá entender, porque aquí nadie sabe de que se trata todo esto ni como verriondos es que este tipo sostiene todo este andamiaje, ya se, me imagino que todos ustedes estarán pensando que todo será producto de los famosos petrodólares, ¡pero nada de esto! ¡No señores!, Dubai solo tiene el 6% del 100% de sus ingresos de cuenta del petróleo, el otro 94% sabrá el mismísimo Alá como lo obtiene, pero nada, aquí lo que interesa es que esto era hace diez años atrás solo un pueblucho en los confines del desierto arábigo, pero hoy, debido a la visión de nuestro patrón emiratí esto se ha convertido en una ciudad enorme y cosmopolita. Para darles una mejor idea, yo diría que esto es como una mezcla entre Miami, Cartagena, New York y parte del sur de España, Claro! Toda mezcla hecha sin reflexión alguna se va construyendo como una colcha de retazos en donde un cuadro no tiene que ver con el otro, pero que igual están tejidos para formar una misma cobija. Esto es Dubai. Toda prevención con la que venía desde la ciudad de la eterna primavera se ha ido desvaneciendo con el paso de los días, pues todos los temas que se refieren el Islam aplican pero no dentro del Emirato de Dubai, debido a que aquí el 75% de la población es extranjera y los majitos queridos se reservan sus leyes para ellos. Hombre! Igual se siente muy extraño ir a mercar a Carrefour y que estén todas las señoras con la cara tapada llevando el carrito del mercado o comiendo en los restaurantes más prestigiosos de Dubai, o lo que es peor: que sus túnicas o los turbantes de los hombres sean marcas Louis Vuitton o Armani. Son raros, pero ya con el tiempo iremos entendiendo este derroche de lujo tan brutal, aquí por donde uno meta la cabeza hay Hummers, Mazzeratti, BMW, Corvettes, Ferraris, Rolls Roys, yates inmensos, en fin; toda esta cultura del derroche y la extravagancia raya con el otro lado de la moneda que son toda la población que trabaja en los servicios que el hombre blanco no hace por aquí, o sea los meseros, los señores de los tintos (aquí no es la señora), los mensajeros, los pega ladrillos, que casi todos son Indios, pakistaníes o filipinos, que dada la pobreza de sus países, prefieren venir a servir aquí, hay que ver que este es un grueso de la población de Dubai. Físicamente son rarísimos, háganse la idea de ver miles y miles de señores iguales a Apu el tendero de Los Simpsons, que son de facciones finas pero parecen chamuscados es un incendio.
Para no extender más este primer comunicado, no queda más que enviarles un gran abrazo a todos y que espero poder sentarme pronto a contarles muchas más cosas del medio oriente.

1 comentario:

Roman Angel dijo...

Que peye ser esclavo de Árabes. Esos pobres afganos (filipinos, Indios, paks) cara de Apu ahí sentados con cara de caballo sediento esperando cualquier limosna pal "tintero en jefe"....pfff, No, no, no. No aguantaría 1 día en su posición. Me les quito el casco a los oprimidos de allá, que aguante. Ha de ser muy gracioso ubicar los productos en Carrefour; las góndolas de abajo no han de valer nada pues el trapo de la dama representa un obstáculo visual constante; igual, su lectura es inversa...que manicomio de primera impresión...mera colcha...no me la imagino aún, ni arquitectónica, ni comercialmente hablando. Saludos Toto. Ox Ala estés Fain ! hehe ;)